Alguien tan aventurero como para querer leer una tesis doctoral en estos días se merece un cuaderno digno de un auténtico héroe… ¡el héroe de Kiln Panic! Nuestro atrevido arqueólogo tendrá que sortear las ánforas hasta alcanzar su horno romano. Podrá ayudarse de la bibliografía, una brújula, un paletín y un pico… ¿misión imposible?